Tenía tantas sonrisas que regalarte, secretos que contarte, canciones que dedicarte, y bromas que hacerte sólo para ver tu mirada y gestos simulando descontento… Al parecer no te importó mi dedicación, mi interés por involucrarme en tu vida y tus temas, pero sobretodo no te importó mi cariño… Llegaste donde nadie más ha podido llegar, a mi corazón y a mis pensamientos… Te quise con una pasión que permanece a pesar del tiempo. Mi deseo fue querer vivirlo y quererte. Si me dijiste al oído lo demasiado que me querías, hoy me pregunto si tus palabras fueron verdaderas. Los recuerdos son imborrables...lamentablemente, pero me servirán de lección, para ver realmente quien eres, para darles la razón a tus enemigos, para no creerte más.
Porque me gana el orgullo, porque me terminaste de demostrar con hechos las palabras y comentarios que expresaban los demás, que no creí, que me negué a creer… no quise ver que eras un montón de mentiras que finalmente se convirtieron en realidad, porque me dijiste a la cara cosas que no eran ciertas, porque me dejaste con los sentimientos a flor de piel y una desilusión que me dolió en el alma… doy finalmente vuelta la página y sigo mi camino.